Capítulo 547
Al escuchar que Femanda conocía a sus esposas, las dos hombres se acobardaron de inmediato.
Femanda sonrid ligeramente y dijo: “Solo me la llevard por un rato, no arruinaré su diversión“.
Frente a esto, obviamente los dos hombres no pudieron oponer más resistencia, y dejaron que Fernanda se llevara a Wilma.
Wilma habla bebido mucho y ya casi no podia caminar. Si no fuera porque Fernanda la sostenis, probablemente habría caldo al suelo.
Cuando vio a Fernanda, Wilma lloraba como una niña “Realmente no sabia que este lugar era asi, si lo hubiera sabido, nunca habria venido
Wima, aferrándose al brazo de Fernanda, lloraba y decía: “Femanda, só que todo fue mi culpa antes, te ruego, llévame contigo, ¿por favor?”
“El camino lo elegiste tú misma, lo que quiero saber es, ¿cómo llegaste a esta cena?”
Según lo que sabia de Wilma, ella venia de una familia común y no tenia los medios para obtener una entrada del Grupo Lobo
Wilma bajo la cabeza, mordiéndose el labio, y dijo: “Fue… yo lo pedi por un favor”
“¿Cómo lo conseguiste?”
Frente a la interrogación de Fernanda, Wilma se retorcia sin querer decir nada
Viendo esto, Femanda dijo friamente: “No me vas a decir? Entonces parece que no tenemos nada de que hablar. Te enviaré de vuelta con esos dos hombres“.
“No, por favor no! Te lo suplico“.
Wilma rápidamente se afero a Fernanda, negándose desesperadamente a volver con esos dos viejos
Fernanda dijo friamente. “Te di una oportunidad, si lo explicas claramente, te ayudaré, Sina, tendrás que enfrentar las consecuencias de tus decisiones“.
Viendo que Fernanda hablaba en serio, Wilma solo pudo morderse el tablo y decir con dificultad “Es, es que consegul la oportunidad… con un director…
Femanda arqueó una ceja y dijo: “Todavia eres una aprendiz en el Grupo Huerta, ir a reuniones privadas con directores sin permiso es una violación del contrato.
“Solo queria sobrevivir. Realmente quiero debutar, y ese director me dijo que había una oportunidad en la cena del Grupo Lobo, incluso medio una tarjeta de presentación, diciendo que era alguien a quien él habia introducido, pero realmente no sabia que este lugar seria…”
Wilma no habla visto mucho del mundo y no sabia que las cenas del Grupo Lobo eran para que esos empresarios eligieran a sus presas para satisfacer sus deseos privados.
Fernanda pregunto de nuevo: “2¿Qué director?”
“El director del programa con el que la compañía se puso en contacto la última vez… en ese momento dijo que le gustaba mucho mi perfil, así que me dejó su información de contacto y yo estaba desesperada…”
“¿Crees en ese tipo de trucos baratos?” Fernanda casi llora por la estupidez de Wilma, y dijo: “Ese director te envia con su tarjeta a la cena del Grupo Lobo, ¿por qué él mismo no viene? Con tanta gente importante y oportunidades de networking, no querría el aprovechar? No eres más que la presa que él entregó a el Grupo Lobo, te ha vendido y tú todavía le debes el favor!”
Las palabras de Fernanda hicieron palidecer a Wilma.
¡Ella no lo sabia! ¡No sabia nada de esto!
“El camino lo elegiste tú, ahora afrontalo,
Habiendo obtenido la información que necesitaba, Femanda no plangabia perder mas tiempo con Wilma, quien al ver que Fernanda se iba, intentó lamarla, pero una mano la detuvo por el hombro.
Cuando Wilma se giro, vio al Sr. Torres,
Wilma estaba desconcertada, y el Sr. Torres con una sonrisa dijo: “Srta, Wilma, hay algo en lo que me gustaría pedirte ayuda“.
Un momento después, Wilma, nerviosa, se acercó a Femanda con dos copas de champán en las manos.
Alver a Wilma agitando su mano hacia ella, Feinanda fruncid ligeramente el ceño: “¿Qué haces aqui buscándome otra vez?!
“Tenias razón en lo que me dijiste antes, ya me di cuenta de mi error, Vine para agradecente y para pedirte disculpes”
Diciendo esto, Wilma le extendió a Femanda una cops de champán.
A pocs distancia, el Sr. Torres y la empleada observaban la escena con nerviosismo, solo cuando se aseguraron de que bebleron juntas, elr, Torres pudo finalmente respirar allylado.
“Rápido, die al Br Lobo que ya está todo arreglado
Como diga, jefplā
La empleada se apresuro
undo pino para preparac a nabilación m’anın
runs risa burjons Pensé quz I
Capitulo 547
En la profundidad de la noche, Oriol empujó la puerta de la habitación, sumida en penumbras, con un tenue resplandor rojo que daba un aire de sensualidad.
Un vestido de cola de pez blanco delineaba perfectamente la figura de la mujer, al ver a la mujer temblando en la cama, Oriol soltó una risa fría.
“Parece que no tienes nada de especial“.
Las mujeres que terminaban en su cama solían ser seductoras y apasionadas o temerosas y asustadas.
Ya estaba cansado de lo mismo de siempre.
Sin embargo, esta vez, Oriol se armó de paciencia y avanzó para arrancar la cinta adhesiva de la boca de la mujer.
En ese momento, la mujer lo miró con el rostro completamente ruborizado: “Tengo calor… ayúdame… me siento muy mal…”
Alescuchar esa voz desconocida, Oriol funció el ceño.
