120 Misión Fallida!
El coche finalmente se detuvo en el patio. Antes de que Bella pudiese salir del coche, Tristan la detuvo.
-Bella, por favor espera.
-¿Sí?
-¿Sigues malinterpretándome o ya me entiendes?
Una sonrisa culpable apareció en el borde de los labios de Bella. Ella lo miró lo preocupado que estaba ahora.
-Lo siento, Tristan, te he estado acusando todo este
tiempo. Sí, ahora te creo.
Saber lo que sucedió en el pasado la hizo preguntarse
si no se hubiera detenido a encontrarse con él en
aquel momento; aún serían marido y mujer. Dax crecería con una figura paterna a su lado, y este hombre sería un padre fantástico para su hijo.
Una oleada de calidez envolvió a Bella al imaginar su feliz pequeña familia, provocando que una suave sonrisa se extendiera por sus labios. Sin embargo, su sonrisa se desvaneció lentamente cuando se dio cuenta de que todo eso era solo su anhelo.
BT
120 Mision Fallida!
Como ser humano, Bella no podía retroceder el tiempo y arreglarlo todo. Solo podía aceptar y soportar todo debido a las decisiones que tomó en el pasado. No podía culpar a nadie: ni a Tristan ni a ella misma.
Bueno,
Al menos todo está claro ahora. Ya no hay
malentendidos entre ellos.
-Gracias, Bella… Pero no tienes que disculparte por algo que yo mismo causé. -Ella no dijo nada y solo pudo devolverle la sonrisa.
Los ojos azules de Tristan brillaban ligeramente
mientras decía:
-Ahora que conoces mi inocencia, empecemos todo de nuevo y seamos marido y mujer otra vez. ¿Qué te parece?
Bella, “….”
Ver los ojos tensos de Tristan esperando su respuesta la hizo tomar otra respiración profunda antes de
contestar.
-Lo siento, Tristan. Mi respuesta sigue siendo no…
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Ella salió del coche antes de que Tristan pudiera decir
algo.
Ningún idioma podría describir cuán decepcionado
estaba él en este momento al escuchar su firme
rechazo.
No era la primera vez que escuchaba a Bella decir esa frase, pero esta vez, se sintió muy dolido porque ella ya conocía la verdad pero aún así lo rechazaba.
Tristan sacó su teléfono móvil y abrió el chat de grupo Alianza Cupido. Con prisa, escribió.
[Tristan] Mi hijo y todos… estamos llegando.
[Tristan] Tengo que decir que la misión ha fallado.
(Emoji triste)
[Dax] ¡Papi, lucha! (Emoji fuego)
[Dax] Tienes mucho tiempo, Papi…
[Noora] ¡Ánimo, Maestro!
[Lewis] ¡Tsk! Tienes que esforzarte, mocoso!
ון
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Respiró hondo, leyendo los mensajes de ánimo de los miembros del grupo de chat.
Tristan sentía que estaba hablando directamente con ellos, aunque solo fuera a través del chat grupal. Sonrió mientras miraba la pantalla de su teléfono móvil y empezó a olvidar el firme rechazo de Bella.
Más tarde,
Tristán se sobresaltó cuando escuchó un suave golpeteo en la ventana del coche. Se volteó a mirar y se sorprendió al ver a Bella parada cerca de su coche.
Pensó que ya habría corrido
vin cu asa.
Justo antes de que quisiera abrir la puerta del coche,
su teléfono móvil vibró.
-No estés triste, Tristán dijo Isaac-. Únete a
nosotros para cenar.
Mientras leía el mensaje de texto de Isaac, una ola de felicidad lo invadió. Sin dudarlo, abrió la puerta del coche y salió, saludándola con una sonrisa como si no hubiera pasado nada.
-Tristán, gracias por llevarme a casa. Puedes irte a casa ya dijo Bella, sin poder ocultar su incomodidad.
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-Bella, yo
-Adiós… -Ella rápidamente dijo antes de que Tristán pudiera terminar su frase.
Bella se dio vuelta y corrió hacia la puerta principal. No quería darle la oportunidad de continuar su
conversación anterior.
Sintiéndose aliviada de finalmente estar libre de
Tristán, Bella entró casualmente a la casa.
Sin embargo, antes de que Bella pudiera cerrar la puerta, de reojo vio a Tristán caminando detrás de ella.
«¿Por qué me ha seguido?», Bella entró en pánico mientras se volvía y se enfrentaba a él. Estaban separados solo por dos pasos.
-¿Por qué todavía estás aqui, Tristán? ¿Quieres recoger a Dax? Tristán, ¿recuerdas nuestro trato? Llevaré a Dax a tu casa después de cenar, pero solo puede quedarse hasta las nueve -le recordó Bella su
acuerdo.
-Por supuesto que lo recuerdo, Bella -dijo Tristán con una sonrisa, notando lo divertida que parecía a pesar de su molestia inicial-. Me uniré a ti y a Dax
a cenmar agregó casualmente, pero sus palabras las la prendierori Casi pierde el equilibrio.
QUE!?Bellalla jadeó mientras se sostenía de la la ed a su ladoler-Tristán, no puedes venir aquíquí no te plazca. 1.statamo es mi casa, sino la casa de mi mi
elo. Tienes qururerespetarlo -suplicó.
a no queria que Frisistan visitara su casa como le lo cía y estresara a susulainielo, que aún no lo había)
donado por lo sucedidirloren el pasado.
o sé, Bella -dijo Tristar
conteniendo la risa-. Porr solo vengo cuando lestominvitado. Tu abuelo me ó que me uniera a ustedeseanara no continuó su se cuando vio a Isaac y a Daxaxaparecer desde entro, acercándose a ellosos.
ella, cuando escuché de Pequeno Das que Tristan
tó nuestra casa, lo invité à unirsese agiosotros para
ar-explicó Isaac.
se quedó sin palabras al ver a susabinielotno podía er que hubiera invitado a Tristan a unirsese allellos
a cenar.
siempre había querido romperle la piprema a- stan cada vez que se encontraban? Bella lentnecececró
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los ojos, mirándolo, tratando de comprobar si hablaba en serio o si solo era una expresión.
¡Dios mío! ¿Desde cuándo abuelo se suavizó con
Tristan?”
-Mami… Al escuchar la voz tierna de Dax, Bella se
volvió a verlo con una sonrisa amorosa.
-Si, cariño…
Dax tomó la mano de Bella -Quiero que papá también se una a nosotros para cenar. ¿Está bien? -preguntó, pestañeando un par de veces para que su madre
aceptara.
Bella, “…”
Se vuelve sospechosa al sentir que su abuelo y su hijo están tramando algo.
Claro… -Bella sonrió calidamente a Dax, dejando de lado sus sospechas sobre ellos. -Ya sabes qué? Mami te extraña. ¿Cómo estuvo tu día? -preguntó
suavemente.
-Hoy estuve ocupado, mami. Pasé el día con la Tía Noora y el Tío Nick… -Dax explicó animadamente su día a Bella.
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Pero más tarde, Isaac lo interrumpió -Muy bien, pequeño hombre. Vamos adentro y hablamos. –
Dax asiente y toma la mano de su padre -Vamos, papi -dice, llevándolos adentro de la casa mientras toma de la mano a ambos padres.
Bella, “…
Tristan se siente feliz y contento, sabiendo que tiene un hijo solidario que ha elegido estar de su lado.
Π
De el primer comentario parae dapitulo
III
Capit
